POR: Víctor Herrera Michel
Colaborador
A pocos kilómetros de donde la multinacional Ternium acaba de inaugurar en el Atlántico su complejo industrial con una de las plantas de acero más modernas del planeta (cuya inversión fue de $270 mil millones para producir 550 mil toneladas al año, con lo cual no solo cubre la demanda de este material en Colombia, sino que tendrá para exportar) se encuentran 2 poblaciones que parecen olvidadas en el tiempo y sumidas en el más cruel atraso.
Se trata de Burrusco, el único corregimiento del municipio de Palmar de Varela, y Cumaco, una vereda del municipio de Ponedera. Se sitúan a solo 40 kilómetros de Barranquilla y allí convergen los vértices de 6 municipios: Santo Tomás, Palmar de Varela, Polonuevo, Baranoa, Sabanalarga y Ponedera. Son 168 familias en estos 2 poblados cercanos que nunca han tenido agua potable. Ahora, un carro tanque de la gobernación les lleva 5 mil litros cada 3 días, que resultan insuficientes. Obtienen el agua sin tratar de un arroyo que viene desde Juan de acosta y pasa por Baranoa, por lo que además de salobre tiene 3 cruces de coliformes fecales, según el análisis de la propia gobernación. Todo ello a pesar de que a menos de 4 kilómetros pasa la línea que lleva el agua tratada entre ponedera y Sabanalarga.
Pese a ello, sus habitantes tienen los más altos estándares de arraigo, todos se conocen y viven en procura de ayudarse unos a otros y existe un matriarcado que rige como autoridad en pro de las necesidades de la comunidad.
Esta grave falta de agua potable parece una constante en el departamento, que, paradójicamente, está rodeado por el Río Magdalena y el Océano Atlántico y que resulta ser el segundo más pequeño del país por lo que las redes que transportan el preciado líquido son en longitud, extensión, instalación y suministro mucho más económicas que en otros entes territoriales.
La Secretaria de Aguas del Departamento, Lady Ospina, nos explicó que la gobernación estará invirtiendo más de $200 mil millones hasta el 2023 para llevar el líquido a los sitios más lejanos y mejorar el servicio en las cabeceras municipales. Y que para suplir el déficit han repartido hasta la fecha: ¡¡más de 25 millones de litros de agua !!
Es, por decir lo menos, vergonzoso que en pleno Siglo XXI y en medio de esta pandemia (que lo primero que exige es el frecuente lavado de manos) los problemas de suministro de agua potable se encuentren incluso en los municipios que conforman con Barranquilla el Área Metropolitana.
Veamos. Soledad, con casi 800 mil habitantes, ni siquiera tiene su acueducto propio. En Puerto Colombia los sectores altos no cuentan con redes o, en el mejor de los casos, no llega permanentemente el líquido. Allí la gobernación y la Triple A inaugurarán próximamente el Tanque Cupino para optimizar el servicio. En Malambo, esta semana se determinó junto con Aguas de Malambo y la alcaldía construir un tanque subterráneo y otro elevado en El Tesoro y otro más aéreo en El Concorde, más una gran inversión en redes, para llevar el suministro de 3 horas diarias a 15. En Galapa, en pocos días se inaugurará un tanque de 5 mil metros cúbicos que, por primera vez, garantizará el suministro 24/7.
La pregunta es: ¿Por qué las anteriores administraciones no invirtieron prioritariamente en saneamiento básico: Acueducto y alcantarillado…?
Lo que está en juego es la vida que, precisamente por falta de agua en muchos sectores del departamento, se ha puesto en riesgo con tantos contagios y muertes durante esta pandemia.
@vherreram