En el tercer trimestre de 2021, los embarazos de menores de 14 años aumentaron 31,5 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2020. La violencia de género durante los confinamientos sería una de las causas de este incremento.
El embarazo de menores de edad es un problema de salud pública que viene escalando. Durante el tercer trimestre de 2021 se registraron 305 partos de menores de 14 años, mientras que en el mismo periodo de 2020 hubo 232, según las cifras más recientes del Dane.
El aumento también se registró en el transcurso del año. Entre enero y octubre de 2021, se registraron 886 embarazos de menores de 14 años, 144 más que en 2020. Además, 496 de los padres de estos recién nacidos tenían entre 14 y 19 años. El resto, 390, eran mayores de 20.
Por otro lado, se registró una disminución de los embarazos de menores entre 14 y 19 años: 91.215 en 2021, 2.188 menos que en 2020. “Esta constituye la reducción más alta observada en lo corrido de 2021”, indicó el Dane.
Más allá de los números, aún no se saben las razones del aumento de los embarazos en niñas. Las organizaciones internacionales de la niñez apuntan a que tendrían que ver con las dinámicas de la pandemia y los cierres frecuentes. También señalan que sería el resultado del aumento de la violencia de género durante los confinamientos y la dificultad de acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva.
De hecho, la organización humanitaria centrada en la niñez Plan International ha enviado varias alertas sobre el incremento de la violencia en contra de los más pequeños en América Latina. “Las medidas de confinamiento colocaron a las niñas en una situación de enorme vulnerabilidad ya que no solo estuvieron encerradas con sus posibles agresores, sino que vieron limitada su capacidad de pedir ayuda y se vieron alejadas de espacios de protección como las escuelas”, señaló la organización.